Dilemas o dile más
Dada la hora de la noche y el arrulllo al que se ve sometida la frabrica de zzzzzz con el sonido que provocan las gotas de lluvia al caer estos dedos se niegan a verificar las fuentes de lo que se escribirá a continuación, pero que sin duda dan por cierto, porque lo han visto en algún medio real o virtual.
La duración del enamoramiento en las parejas dura máximo tres años, tal vez ello justifique el deseo de buscar en alguien más la circulación de la sustancia que bien podríamos llamar "mariposeo estomacal".
Lo cierto y lo palpable es que ninguna relación sentimental de pareja tiene al reverso ni el contenido neto y mucho menos la fecha de caducidad.
Quienes hayan vivido una relación más larga que el periodo indicado como apto para sacar chispas por la ciencia, saben:
Que después del enamoramiento si se superan los obstaculos (cualquier obstaculo, no sólo los planteados por Corín Tellado y todas las exponentes de la literatura rosa) llega lo que en el planeta tierra se conoce como amor.
El amor, dice Francesco Alberoni en su libro Enamoramiento y Amor Editorial Gedisa, año 199X, es el cimiento de una relación, lo que sea que eso signifique.
Para otros, como los psicologos de la barra matutina de la radio del df, uno continua las relaciones de pareja después del periodo de enamoramiento en los terrenos de la fidelidad porque representa un compromiso de honestidad y confianza con lo que alguna vez fue "andar" con alguien y de pronto se convierte en un proyecto de vida, algo así como una yunta de arado donde los dos bueyes jalan para el mismo lado.
Lo más cabrón (excuse my french) es cuando a la vida de alguno de los miembros de equis pareja se presenta un tercero o una tercera, el o la infiel en potencia ha detectado algo que desató la producción de la sustancia del "mariposeo en el estomago" y lo asocia con algo especifico de la tercer persona.
¿Será en verdad cierto que dicha sustancia se extingue con la pareja en turno pero surge con alguien no conocido, conocida, conocidu, conocide o conocidi? (lo anterior no sólo fue para manifestar la equidad de genero sino también la equidad en las vocales del alfabeto).
La cotidianeidad, la rutina representan minas que se esparcen en una relación con el día a día y que pueden explotar el día menos pensado.
Tal vez es el ruido de esas bombas lo que nos provoca alejarnos de la persona supuestamente amada.
Por lo que el enemigo a vencer en una relación es justo lo cotidiano, lo rutinario, lo mismo de siempre.
En ambos casos se requiere creatividad infinita, ya sea para amar o para simular.
Lo más delicado es que aplica para ambas partes de una relación.
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